miércoles, 4 de enero de 2012

Lo que sucedió a un hombre que tenía mucha hambre, a quien convidaron por cumplido a comer.

Diego Velázquez (1620-1621): Dos hombres en la mesa. Museo Wellington. Londres. 
Hablando otra vez el conde Lucanor con Patronio, su consejero, díjole así:

-Patronio, un hombre ha venido a verme y me ha dicho que estaba dispuesto a hacer por mí una cosa que me conviene, pero me lo ha dicho de una manera que he comprendido que he comprendido que le agradaría que yo no aceptara de él esa ayuda. Por una parte me vendría muy bien que hiciera lo que me promete, pero por otra no me decido a aceptarlo, ya que me lo ofrece como por cumplido. Por vuestro buen entendimiento os ruego me digáis lo que creéis que yo debo hacer.
-Señor conde Lucanor-dijo Patronio-, había un hombre muy respetable que había sido rico y se quedó muy pobre, al cual le daba mucha vergüenza de pedir a nadie de comer, y por esta razón sufría a menudo mucha hambre. Un día en que estaba muy afligido por no hallar nada pasó por la casa de un conocido que estaba comiendo. Cuando el otro lo vio pasar redijo, por cumplido, si quería comer. El pobre, constreñido por la necesidad, empezó a lavarse las manos y a responderle del siguiente modo:
-En verdad, don Fulano, pues tanto insistís y tanto me rogáis que coma con vos, no me parece que sería correcto desatender vuestro ruego y desdeñar lo que con tan buena voluntad ofrecéis.
Dicho esto, se sentó a comer, sació el hambre y quedó consolado; y de allí en adelante le ayudó Dios, dándole los medios para salir de aquella miseria tan grande en que estaba.
Vos, señor conde Lucanor, pues veis que os conviene lo que ese hombre se ofrece a hacer, dadle a entender que lo aceptáis por complacerle, no os fijéis en si lo hace o no por cumplido, y no aguardéis a que insista más; si no, a lo mejor no os vuelve a hablar de ello y os costará más trabajo pedirle que haga lo que el mismo ahora se ofrece a hacer.
El conde tuvo este consejo por bueno, obró según él y le salió muy bien. Viendo don Juan que este cuento era bueno, lo hizo escribir en este libro y compuso unos versos que dicen así:
No te hagas mucho de rogar
en lo que te pueda beneficiar. 

Don Juan Manuel (1282-1384): Cuento XVII de El Conde Lucanor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

AGRANDA EL TEXT